La burocracia soviética se importó a Cuba de forma premeditada |
El régimen cubano siempre se ha guiado por una máxima: "convertir los reveses en victorias". No importa si para lograrlo contradicen las mismas ideas que llevan décadas enarbolando y dan muestras de la más absurda hipocresía. Hoy sólo quiero dar dos ejemplos de lo que hablo: la actual batalla contra la "burocracia", y el florecimiento de exitosos negocios privados.
El segundo ejemplo lo tenemos en los negocios por cuenta propia. Durante décadas, quienes se atrevían a ejercer una profesión o trabajo de forma privada, terminaban en la cárcel purgando largas condenas. Ahora, siguiendo el patrón de "convertir los reveses en victorias", presentan los éxitos de esos nuevos negocios privados (a pesar de las restricciones y los altos impuestos) como éxitos de la revolución. Si esos nuevos emprendedores están teniendo resultados económicos alentadores, no es gracias a su esfuerzo personal y el de sus familiares en el exterior, que en la mayoría de los casos financian las empresas, sino "gracias a las magnificas oportunidades que les ha brindado la revolución". Asi es como el Noticiero Nacional de Televisión, que hasta hace muy poco mostraba a los condenados a largas condenas por trabajar de forma privada, hoy muestra propaganda comercial de los negocios por cuenta propia, y realza las ventajas de los mismos en terminos de eficiencia y calidad en la atención al cliente (algo que las empresas estatales nunca lograron).
Vamos, que si queremos hablar de hipocresía y oportunismo, los dirigentes cubanos se llevan las palmas.