El destacado intelectual cubano Carlos Alberto Montaner es para las autoridades cubanas un "agente de la CIA" y un "terrorista", lo que no debe asombrar a nadie pues todo el que en estas cinco décadas se ha opuesto a la monarquia tropical, ha terminado con el mote de mercenario, delincuente con antecedentes penales, vendepatria, terrorista o agente de la CIA. Pero bueno, recordaba a Carlos Alberto Montaner por una frase suya, que no por ser una broma, deja de ser una gran verdad: "el socialismo es el tiempo que pierden los paises entre capitalismo y capitalismo". En el caso de Cuba, ese tiempo perdido suma ya 50 años.
La realidad nos ha mostrado que la inmensa mayoria de los paises que alguna vez fueron socialistas, han regresado al capitalismo. De los cuatro gatos que aún se dicen socialistas, a Viet Nam y China sólo les queda de socialistas el partido único. Corea del Norte es un caso perdido y su pueblo esta pagando el culto a la personalidad y el lavado de cerebro con una hambruna que ha matado a millones.
De ese cuarteto nos queda Cuba, que ha comenzado el regreso inexorable, aunque lento, al capitalismo. El pais que hizo de la igualdad una bandera y que en nombre de esa igualdad confiscó hasta las tijeras de los barberos y suprimió todas las libertades individuales y reprimió a todo el que alzara la voz en su contra, ahora da pasos firmes hacia atrás. No sólo van a despedir a mas de 1 millón de trabajadores (lo cual es necesario pues los resultados productivos no se corresponden con el número de empleados), sino que han levantado la absurda prohibición contra el trabajo privado y la pequeña empresa.
Es en ese trabajo privado que está el germen de la destrucción del sistema socialista totalitario, pues para mantenerse en pie esos regímenes necesitan que el ciudadano dependa totalmente del estado. A cambio de recibir todas esas supuestas gratuidades, el ciudadano forma una dependencia absoluta del gobierno, al que debe obedecer en todo momento so pena de perder los "favores" que recibe. El lavado de cerebro empieza desde la escuela y les acompaña hasta la tumba.
Cuando los ciudadanos empiezan a generar riqueza de forma independiente, el control del gobierno se resquebraja y la participación en las actividades del gobierno, hasta ayer obligatorias, dejan de tener sentido, por lo que la gente no se suma al circo que regularmente el gobierno monta para mantenerlos entretenidos.
El propio gobierno revolucionario esta desmontando la madeja de leyes absurdas e instituciones estúpidas que han construido durante cinco décadas. Se han dado cuenta de que han destruido al país y que la única forma de repararlo es regresar lentamente al pasado, a lo que economicamente tenia sentido y funcionaba.
Demos pues la bienvenida a las empresas privadas y la no dependencia del gobierno. Demos también la bienvenida a los campos de golf exclusivos, pues aunque hoy sean para turistas ricos y la cúpula gobernante y sus familiares, en el futuro los cubanos exitosos también disfrutarán de ellos .
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