Ahora que Yoani Sanchez ha logrado hacer valer su derecho de salir y entrar libremente de Cuba (después de 20 negativas del régimen) han comenzado los ataques personales, no por parte del régimen, sino de gente en la oposición, gente que al final busca el mismo objetivo que Yoani.
Me parece absurdo que si todos estamos luchando por lo mismo, terminemos en ridículos ataques personales. Es por eso que el régimen lleva 5 décadas y seguirá 5 más, porque en vez de concentrarnos en el objetivo común, le hacemos el trabajo sucio a los segurosos.
Ahora muchos acusan a Yoani, la cara más visible de la oposición en el exterior, de protagonismo, pero en el intento, algunos no pueden esconder el afán de protagonismo que les mueve. También la acusan de omisiones y olvidos, como si fuera obligatorio tener que recordar a todos y cada uno de los que algo hacen por liberar a Cuba. !Martí nunca exigió publicidad!
Para algunos en la oposición, Yoani es "mala" porque es famosa y "no nos menciona", y porque "nosotros empezamos primero". Es decir, Yoani es culpable de que no los conozcan. Un argumento simplista y sin sentido.
Y no es que Yoani sea perfecta o no sea criticable, pues defectos tiene muchos, sino que la crítica no debe resultar de celos absurdos o envidia malsana, y menos terminar en ataques personales. Que haya crítica entre los opositores es una muestra de pluralidad y democracia, como lo es que hayan distintos puntos de vista sobre la solución al problema cubano. Pero los ataques personales no tienen nada que ver con la crítica.
Quienes llaman a Yoani "serpiente" como he visto a alguna periodista independiente decir por ahí, están haciendo más fácil el trabajo de la dictadura. Lo peor que nos puede pasar es seguir divididos, y que una vez lograda la ansiada libertad, empiecen las rencillas personales y los caudillismos y terminemos con un problema peor que el que ahora tenemos. Pensemos que en una Cuba democratica cada uno presentará sus ideas y programas y el pueblo decidirá cual seguir.
Yo apoyo a todos los que valientemente se enfrentan al régimen dentro de Cuba, y también apoyo a Yoani, porque a pesar de los muchos defectos que tiene, ha puesto la lucha del pueblo cubano en primera página en la prensa del mundo entero. Ese mérito no se le puede quitar.
Dejemos las ofensas para el régimen y unámonos en el objetivo común, que es una patria libre y democrática. Cuando Cuba sea libre, tendremos tiempo de reconocer los méritos de todos. Mientras tanto sigamos todos aportando el granito de arena que acabará con la dictadura.
La publicidad y la atención que genera Yoani con su crítica a la dictadura no debe ser motivo de celos. El daño que le hace a la imagen del régimen es más importante que saber quién le paga los viajes o si tiene un I-phone o si gana muchos premios, que es la trampa en que algunos caen.
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